Monomando, bimando, termostático o cascada. ¡Nuestra amplia gama de grifos se adapta a lo que necesitas en tu baño! El momento ideal para elegir grifo es cuando eliges el lavabo. Te encontrarás con varias tipologías y funcionalidades. Te damos algunas claves para elegir grifo para el baño.
Diferentes tipos de grifo:
- Lavabo bimando: son aquellos grifos que cuentan con 2 mandos, uno para el agua fría y otro para el agua caliente. Esto hace necesario manipular ambos para conseguir una temperatura adecuada.
- Lavabo monomando: se consigue agua más fría o más caliente moviendo el mando de izquierda a derecha.
- Con control de infrarrojos: son comunes en baños públicos y sirven para no malgastar agua.
- Caño estándar: la altura del caño cobra importancia. La estándar es la que encontramos en la mayoría de lavabos.
- Caño alto: son perfectos para los grifos que van apoyados directamente en la encimera del mueble de baño, sobresaliendo del conjunto.
Grifería empotrada
Está de moda. Si decides empotrar tu grifo, tendrás a tu disposición diseños minimalistas y tu lavabo quedará totalmente despejado. Esto te da mucha más flexibilidad a la hora de elegir un modelo de lavabo. La distancia entre el lavabo y el caño del grifo es mucho mayor, por lo que ganarás espacio y movilidad.
Mantenimiento del grifo
Para limpiar la grifería y mantener el brillo en superficies cromadas, lacadas y doradas, debes utilizar una bayeta suave ligeramente enjabonada. Después, enjuagar y secar con un paño. Es importante no emplear productos de limpieza abrasivos, disolventes, vinagre o estropajos.
- Para eliminar los restos de cal basta con que seques el grifo con un paño seco después de cada uso.
- Para quitar las manchas de moho, óxido y vapores solo tienes que frotar suavemente con lana de acero.